La
Alianza refugiada en el helado mundo de Hoth,
está escondida del vengativo contraataque del Imperio,
cuyas fuerzas están buscándola por toda la galaxia. Uno de los
miles de probe droids enviados descubre la ubicación de
la Base Echo mientras que Luke Skywalker en un paseo
de reconocimiento es capturado por un hambriento wampa,
pero escapa gracias a la Fuerza y es cuando Obi-Wan
se le aparece fantasmalmente diciéndole que debe buscar, en Dagobah,
a Yoda, el último maestro jedi, para que termine
su entrenamiento. Al ver que Luke no regresa, Han Solo
decide ir a buscarlo exponiendo su vida, encontrándolo semi congelado,
pero afortunadamente vivo.
Los
rebeldes descubren al probe droid imperial, del que se encargan
Han y Chewie, y ante la inminente llegada de los AT-ATs
del Imperio, deciden hacerles frente mientras el resto
evacúa la base, y así se inicia la batalla, los snowspeeders
rebeldes no pudieron ante el demoledor ataque, pero los héroes
de la rebelión logran escapar por un pelo, siguiendo rutas distintas:
Luke y R2-D2 se dirigen a Dagobah y; Han, Leia,
Chewbacca y C-3PO no pueden saltar al hiperespacio a bordo
del Millennium Falcon, siendo perseguidos por la flota
imperial a través de un gran campo de asteroides, donde despistan
a los TIE
Bombers y al destructor Avenger.
En el momento en que la flota decide desplegarse para iniciar
una búsqueda exhaustiva, el Falcon escapa y se dirige a
Bespin
para reparar el hiperimpulsor de la nave, sin darse cuenta que
son perseguidos por Boba Fett en su Slave I, el
más famoso de los cazarrecompensas convocados por Darth
Vader para ayudar en la captura de Luke, a quien planeaba
llevarlo ante el emperador Palpatine en pos de su conversión
al Lado Oscuro de la Fuerza.
Mientras
Luke, ajeno a todo esto, llega al planeta fangoso de Dagobah,
donde se encuentra con Yoda, el sabio anciano maestro, quien se
niega en un principio a entrenarlo para jedi, de no ser por la
intervención del espíritu de Obi-Wan Kenobi. El entrenamiento
es duro e incluyó, entre otras pruebas, un enfrentamiento consigo
mismo, en la forma de un Vader fantasmal, y rescatar a su propia
nave que se estaba hundiendo en el pantano.
El
Falcon llega a Cloud City en Bespin, una colonia
minera cerca de Anoat.
Su barón-administrador es Lando Calrissian, antiguo compañero
de aventuras de Han y anterior propietario del Falcon.
Les ofrece alojamiento, pero algo no está bien, Leia desconfía.
Mientras tanto, Luke continúa entrenándose, pero siente que sus
amigos están en peligro, entonces decide partir inmediatamente
en su rescate. Yoda le advierte que si abandona ahora, todo el
trabajo se perderá, pero Luke promete que volverá a culminar su
entrenamiento.
Lando,
obligado por los imperiales, que llegaron poco antes, traiciona
a sus huéspedes que son entregados a Vader. A Solo lo congelan
en carbonita y es entregado a Fett -el cual a su vez lo
llevará ante Jabba the Hutt, en Tatooine,
por su cuenta pendiente- mientras que Leia es usada de carnada
para atraer a Luke, que llega poco después. Pero Lando cambia
de parecer, y libera a la princesa y al wookiee, mientras
que Luke se confronta a Vader en duelo, éste último le derrota
cortándole la mano derecha, y encima le revela el secreto que
cambiará el destino de Luke para siempre: Vader es su padre. Luke
aterrado, incrédulo ante tal revelación se deja caer al vacío,
quedando suspendido en una antena de comunicaciones (en la parte
inferior de la ciudad flotante), para luego ser rescatado por
el Falcon, el cual no llega a interceptar a la nave de
Fett para rescatar a Han.
Finalmente
logran escapar, y llegan donde está concentrada la flota rebelde
(presumiblemente cerca del laberinto Rishi), y a Luke le
implantan una mano mecánica. Aún estaba en la enfermería cuando
se despide de Lando y Chewie quienes se dirigen a Tatooine a iniciar
el rescate de Han. El final de la Saga está cerca.